El espacio

Huerto típico valenciano de naranjos de 1890



Huerto típico valenciano de naranjos de 1890, sometido a un cuidadoso proceso de restauración, con el objetivo de mantener la esencia de los huertos valencianos de finales del s. XIX y principios del s.XX, conservando la estructura de vigas de madera y creando espacios abiertos que consiguen una agradable habitabilidad. El huerto se encuentra rodeado de una finca de 4 hectáreas de producción ecológica de diferentes cultivos, creando un microecosistema de fauna y flora autóctona alrededor de la casa.




Hort de les Oronetes es un bosque de naranjos y cultivos ecológicos que se extiende a lo largo de 4 hectáreas. En él, conviven árboles centenarios y variedades antiguas preservadas para evitar su desaparición, rodeados de setos mediterráneos y hierbas silvestres que protegen la fertilidad del suelo y sirven de refugio para la fauna local.



En constante evolución hacia una gestión agroecológica integral, la finca promueve la biodiversidad, respetando los ciclos naturales de cada especie. Se han diseñado ecosistemas húmedos para proporcionar hábitats a anfibios y mamíferos en un entorno donde estos espacios son cada vez más escasos. Además, las antiguas balsas de riego han sido adaptadas no solo para refrescar la finca y ofrecer un lugar de descanso a los huéspedes, sino también para convertirse en una fuente de vida para la fauna del huerto.



El alojamiento apuesta por la sostenibilidad, generando la mayor parte de su energía a través de placas solares fotovoltaicas y un eficiente sistema de calefacción por aerotermia, que aprovecha fuentes renovables para climatizar la casa de manera ecológica.

Sumérgete en un entorno donde naturaleza, historia y confort se fusionan para ofrecer una experiencia única en plena huerta valenciana.

Flora y fauna



El Hort de les Oronetes es un refugio natural donde la biodiversidad prospera en armonía con el entorno agrícola. Entre los campos de naranjos y setos mediterráneos, habitan numerosas especies de fauna autóctona. Es común avistar conejos, zorros, tejones, jabalíes y aves rapaces como cernícalos, autillos, lechuzas y, en ocasiones, majestuosos búhos reales o águilas en su zona de caza. Además, el huerto es hogar de anfibios como el sapo partero y la rana verde, así como de diversas especies de artrópodos y pájaros insectívoros que contribuyen al equilibrio natural de los cultivos.



La flora del huerto cambia con las estaciones, creando un paisaje vibrante gracias a una cubierta vegetal de gramíneas silvestres, mielgas, vezas, lisones, lobularias y mostaza silvestre, algunas con usos gastronómicos. Entre los árboles y arbustos mediterráneos destacan almeces, fresnos de flor, cipreses, moreras, caquis, laureles, cerezos silvestres, madroños, mirtos y romeros, que no solo embellecen el entorno, sino que cumplen funciones ecosistémicas esenciales como la retención de agua, la creación de sombra y la protección contra la erosión.

Además, dentro de la finca se ha diseñado un pequeño jardín tropical con plataneras, monsteras, helechos macho y palmeras, aportando un contraste exótico al paisaje y enriqueciendo aún más la diversidad botánica del Hort de les Oronetes.